El Vocero de Seguridad de Nuevo León descartó que el ataque en el Colegio Americano del Noreste haya sido resultado de la influencia de algún grupo; fue por un cuadro depresivo.
“Fue resultado de un estado depresivo o de un estallido, nada más”, aseguró el Vocero de Seguridad de Nuevo León, Aldo Fasci.
No existe evidencia alguna de que el adolescente que disparó contra sus compañeros en el Colegio Americano del Noreste, en Monterrey, haya obedecido órdenes de nadie.
El funcionario afirmó que el adolescente era aficionado a la caza y el arma que llevó a la escuela “era del papá; estaba registrada, era legal”. Confirmó que un día antes del incidente, el muchacho comentó con algunos compañeros que llevaría la pistola, pero no les dijo qué haría con ella.
De acuerdo con la Policía Cibernética, el atacante no tenía relación con el grupo llamado Legión Holk y nadie le dijo qué debía hacer, “lo que refuerza la línea de que hubo un cuadro depresivo”.
El vocero de Seguridad descartó que el atacante tuviera padecimientos psiquiátricos o estuviera medicado.
También rechazó que hubiera acoso escolar en este caso, “no era víctima de bullying”.
En cuanto a las víctimas, dijo que “siguen muy graves, hay que esperar entre tres y cinco días más para saber cómo evolucionan”.