El día de hoy se puede apreciar el doodle del buscador Google haciendo honor a la filósofa española; María Zambrano, donde que aparece sentada en una ventana, leyendo un libro a lado de su gato.
Pero, ¿Quién fue María Zambrano?
María Zambrano fue filósofa y ensayista española, su extensa obra, entre el compromiso cívico y el pensamiento poético, ya en edad avanzada, recibió los dos máximos galardones literarios concedidos en España: el Premio Príncipe de Asturias en 1981, y el Premio Cervantes en 1988. Defendió en vida el conocimiento, se unió a partidos políticos donde se aferró al respeto por la cultura, al igual que fue profesora de escuelas de estudio para mujeres, sin dejar de lado los reconocimientos que recibió en vida y después de su partida, por su lucidez y brillante pensamiento.
Para conocer más de esta filósofa te damos a conocer un poco de su trayectoria, la pensadora estudió en la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad, en la Universidad Central de Madrid, En 1931 fue nombrada profesora auxiliar de Zubiri en la cátedra de Metafísica en la Universidad Central.
En plena guerra civil española colaboró en la defensa de la República desde el consejo de redacción de Hora de España, así como participó en el II Congreso Internacional de Escritores para la defensa de la cultura que se realizó del 4 al 17 de julio de 1937 en Valencia, mismo lugar donde conoció a Octavio Paz, Elena Garro, Nicolás Guillén, Alejo Carpentier y Simone Weil.
Fue nombrada Consejera de Propaganda y Consejera Nacional de la Infancia Evacuada, y participó en la reapertura y gestión de la Casa de la Cultura de Valencia.
María Zambrano como era de esperarse por su ideología, se sumó al manifiesto fundacional de la Alianza de Intelectuales para la Defensa de la Cultura, inició su tarea de profesora de filosofía en la Residencia de Señoritas y en el instituto Cervantes, en el que Machado ocupaba la cátedra de Francés.
También fue nombrada profesora en la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo de Morelia, (Michoacán), lo que supuso para María un pequeño exilio dentro del gran exilio y provocó que abandonase México, viviendo unos años entre Puerto Rico y Cuba.
Su estancia en México la inspiró para publicar sus libros Filosofía y poesía y Pensamiento y poesía en la vida española, y entablaría relación con Alfonso Reyes y Daniel Cosío Villegas.
Entre 1940 y 1945 trabajó arduamente en seminarios y ciclos de conferencias o dictando lecciones y cursos en diversas instituciones cubanas y puertorriqueñas, como el Departamento de Estudios Hispánicos de la Universidad de San Juan de Puerto Rico, la Asociación de Mujeres Graduadas y el Ateneo, o la Asamblea de Profesores de Universidad en el exilio reunida en La Habana. Paralelamente continúa publicando artículos y algunos libros como La Confesión: Género Literario y Método, La agonía de Europa o El pensamiento vivo de Séneca.
A su vez, el ayuntamiento de Vélez-Málaga, su ciudad natal, la nombró Hija Predilecta. Al año siguiente, el 19 de diciembre, la Junta de Gobierno de la Universidad de Málaga acordó su nombramiento como Doctora honoris causa, la edad no la detuvo y gracias a su lucidez obtuvo el reconocimiento Hija Predilecta de Andalucía en 1985, en 1988 se le concedió el Premio Cervantes.
Los reconocimientos siguieron a título póstumo, muchos de ellos reivindicaciones autonómicas: Hija Predilecta de la Provincia de Málaga en 2002. El 27 de noviembre de 2006 el Ministerio de Fomento bautizó con su nombre la estación central de ferrocarril de Málaga. En 2008 se botó el buque remolcador de salvamento marítimo, María Zambrano.
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