La cantante Taylor Swift demandó a David Mueller un disc-jockey de Colorado al que la cantante acusa de haberle agarrado una nalga mientras les tomaban unas fotografías antes de un concierto. Swift al demandar solicito el monto simbólico de un dólar por los daños, ya que su intención no era dejar en la calle a este señor sino enseñarle una lección; "Significa 'no, quiere decir no' y le dice a todas las mujeres que ellas decidirán qué será tolerado con su cuerpo" así lo afirmó Douglas Baldridge el abogado de la cantante.
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