Una investigación a partir de fósiles hallados en Igea (La Rioja) ha logrado identificar una nueva especie de dinosaurio denominada 'La cazadora del lago' o Riojavenatrix lacustris, un bípedo del grupo de los espinosaurios, piscívoro, que medía 8 metros de largo y 2,5 de alto y pesaba 1,5 toneladas.
El director honorífico del Centro de Interpretación Paleontológica de La Rioja, Pachi Sáez-Benito, y el paleontólogo de la Universidad del País Vasco (UPV/EHU) Xabier Pereda Suberbiola, han detallado este fin de semana a diversos medios, la importancia de este hallazgo, antes de presentarlo en un acto público en Logroño.
Sáez-Benito ha explicado que a este ejemplar, que tiene un género y especie nunca antes definido, se le conoce coloquialmente como Britney.
Así lo dijo: “Es un dinosaurio con un cráneo bajo, con un morro alargado, con dientes cónicos y subcónicos, muy parecidos a los que puede tener un cocodrilo”.
El estudio también ha permitido determinar cuál era la base de su alimentación y la manera en la que capturaba a sus presas.
“En cuanto a alimentación era un dinosaurio especializado en comer peces; era piscívoro y luego le acompañaban dos brazos muy grandes y hipertrofiados acabados en tres dedos y con tres garras que las acompañaban que les servirían como herramienta para cazar”, agregó el científico español.
Esta especie única en el mundo vivió hace 120 millones de años y es el quinto espinosaurio descrito en la Península Ibérica. Este ejemplar se suma al Camarillasaurus en Teruel; el Vallibonavenatrix y el Protathitis en la Comunidad Valenciana y el Iberospinus luso.
Sin embargo, su nombre científico responde a Riojavenatrix lacustris: por el territorio que le vio nacer, por ser un animal cazador y porque sus huesos aparecieron convertidos en fósiles en los sedimentos de lo que fue el fondo de un lago hace 125 millones de años.