La noche del miércoles fue otra noche tensa para los habitantes de Culiacán, tras varios operativos desplegados y detenciones de integrantes de grupos delictivos generó incertidumbre en la ciudad.
Buscamos la opinión de la ciudadanía pero no obtuvimos respuesta, prefirieron no compartirla.
A medio año de que la violencia se desatara en el centro de Sinaloa muchas cosas han cambiado, la vida nocturna que ya no existe, algunos negocios tuvieron que cerrar y las clases y centros de trabajos en distintas ocasiones ha tenido que migrar a la virtualidad.
Este jueves, las calles de Culiacán se veían poco transitadas, los puntos emblemáticos como la Plazuela Álvaro Obregón estaba sola.
La ciudadanía a la expectativa de lo que pudiera ocurrir prefirió NO salir de sus hogares, pero aquellos que por obligación tuvieron que acudir a algún lado lo hicieron.
La Secretaria de Educación Pública y Cultura anunció por la mañana la suspendió actividades escolares de forma presencial este jueves en Culiacán, al igual que la Universidad Autónoma de Sinaloa y la Universidad Autónoma de Occidente, estos planteles trabajaron de manera virtual.
Lo que queda claro es que después de seis meses de hechos violentos la sociedad en Culiacán ha implementado estrategias de auto protección para evitar ser parte de las estadísticas como víctimas colaterales.
