Otorgar poderes de dominio a una tercera persona puede parecer una solución práctica y conveniente, pero puede ser riesgoso si no se toman las debidas precauciones, por lo que, Víctor Manuel Landeros, hizo una llamada a la ciudadanía a realizar poderes de dominio limitados.
El notario de la localidad, explicó que dar el control a terceros sobre tus bienes puede tener consecuencias graves y duraderas.
Algunas de ellas pueden ser la posibilidad de que la tercera persona actúe en su propio beneficio, en lugar del propietario, la venta, el alquiler, la destrucción de los bienes, perder control sobre la situación, entre otros.
Otra de las recomendaciones es asegurarse de que la tercera persona sea alguien de confianza y con experiencia en la gestión de bienes, revisar y actualizar regularmente el poder de dominio para asegurar que siga siendo adecuado para las necesidades del propietario, y establecer límites claros y específicos sobre las acciones que la tercera persona puede realizar.
De igual manera seguir las recomendaciones de los expertos, para no poner en riego bienes y activos, y asegurarse de que los intereses del propietario estén protegidos.
