Ante el crecimiento urbano de Mazatlán, activistas y ambientalistas del Centro para la Educación Agrícola y Ambiental de Mazatlán buscan preservar la flora y fauna silvestre local.
Para ello, han propuesto la creación de un fraccionamiento ecológico llamado" Los Farriols", un espacio cercado donde los animales puedan vivir en condiciones seguras y con atención veterinaria adecuada.

David Ocampo Peraza, Ambientalista del CEAM, comentó que el proyecto no solo busca la conservación de especies, sino también la educación ambiental. Sin embargo, la falta de apoyo financiero y de conciencia ciudadana ha sido un obstáculo para su desarrollo.
Actualmente, en el refugio se realizan actividades de cultivo y talleres que conectan a niños y adultos con la naturaleza, fomentando el aprendizaje sobre biodiversidad y sostenibilidad.