La crisis de violencia que registra Sinaloa desde hace ocho meses, ha refugiado a los católicos en la fe.
Esteban Robles, vocero de la Diócesis de Culiacán, expresó que las asistencias a misa dominical y semanal no se ha disminuido.
Aun y con el incidente que se registro en las inmediaciones del estacionamiento de La Lomita en Culiacán, las familias atienden los llamados a misa.
La iglesia católica se sumó a la exigencia de garantizar seguridad a la población.
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