Facebook y Facebook Messenger son lo que se llaman “aplicaciones vampiro”. Se dedican a consumir datos de nuestro dispositivo incluso cuando no las estamos usando. Es por eso que decidimos desinstalar ambas aplicaciones y probar la versión móvil. ¿Cómo puedes usar Facebook sin instalar la aplicación? Pues abriendo tu navegador y accediendo a facebook.com. Fácil y sencillo. ¿Quieres ver cómo es el cambio?
La versión web no tiene nada que envidiarle a la app móvil. Si no quieres tener que estar abriendo el navegador cada vez que quieras acceder a Facebook, simplemente tienes que añadir un acceso directo en tu escritorio. Así, cada vez que quieras acceder a Facebook te ahorrarás un par de pasos. ¿Cuál es el problema? Que Facebook ha capado la función de Messenger, por lo que no podrás mandar mensajes –aunque hay un truco–.