EPN presenta Reforma Energética

La iniciativa de reforma energética que el presidente Enrique Peña Nieto enviará al Senado de la República propone que el artículo 27 de la Constitución vuelva a decir lo que el presidente Lázaro Cárdenas dejó escrito, palabra por palabra, explicó el mandatario durante la presentación del documento. En el texto entregado por el presidente Cárdenas al Congreso en 1940, se especificaba: “La exclusión de los particulares del régimen de concesiones del artículo 27 no implica que la nación abandone la posibilidad de admitir la colaboración de la iniciativa privada, sino que ésta deberá realizarse en el futuro dentro de las formas jurídicas para las formas diversas de explotación”. Una enmienda de los años sesenta, sin embargo, prohibió la celebración de contratos con particulares y, debido a esa determinación, Petróleos Mexicanos, una empresa también creada por el general Cárdenas, quedó obligada a hacerse cargo de la exploración, refinación, almacenamiento y distribución de los hidrocarburos. Con esta iniciativa de reforma, el gobierno federal pretende dar herramientas para desarrollar la industria petrolera bajo la rectoría del Estado. A su vez, promueve el desarrollo de un sistema eléctrico nacional basado en principios técnicos y económicos, bajo la conducción y regulación del Estado. Específicamente en materia de petróleo y gas, el documento tiene cinco ejes rectores: 1.- Retoma el texto del artículo 27 Constitucional propuesto por el presidente Lázaro Cárdenas. Permite celebrar contratos de utilidad compartida, entre el Gobierno de la República, Pemex y/o particulares, para exploración y extracción. También concede permisos para refinación, petroquímica, transporte y almacenamiento. El documento no considera contratos de producción compartida; es importante subrayar, explicó el mandatario, que los contratos que se firmen permitirán mantener el control de los hidrocarburos: reservas, renta y Pemex 2.- Corrige el Régimen Fiscal de Pemex para que sea plenamente competitivo. En el documento de reforma hacendaria que será presentado en septiembre, se propondrá un nuevo esquema, competitivo, conforme a estándares internacionales. El estado actuará como dueño de la riqueza con visión de largo plazo y no como un recaudador con necesidades de corto plazo, abundó el presidente. 3.- Reestructura a Pemex y sus subsidiarias en dos divisiones: exploración y producción, y transformación Industrial. 4.- Mejora las condiciones de transparencia y rendición de cuentas en Pemex. Los mexicanos contarán con adecuado acceso a la información sobre el estado del patrimonio energético y podrán conocer de qué manera se asignan y se firman los contratos con la paraestatal 5.- Establece una política nacional de fomento a las compras de proveedores nacionales del sector hidrocarburos. De esta forma se utilizará el gran poder de compra del sector energético como palanca del desarrollo, pero esto deberá acompañarse de la formación de recursos humanos especializados, para lo cual jugarán un papel destacado las instituciones educativas como la UNAM, el Instituto Politécnico Nacional, el Conacyt y el propio Instituto Mexicano del Petróleo Con estas medidas se restituirán las reservas probadas de petróleo y gas al 100%, pues la producción iría acompañada de descubrimientos de yacimientos no someros que permitirían aumentar la producción. La producción de crudo aumentaría de 2.5 millones de barriles diarios a 3 millones para 2018 y a 3.5 millones o más para 2025, cifra histórica de producción en México. En el caso del gas natural, la producción pasaría de 5,700 millones de pies cúbicos a 8 mil millones para 2018, y para 2025, la producción sería de 10 mil millones de pies cúbicos. Esto permitiría, explicó Enrique Peña Nieto, mejorar la economía de las familias, pues bajarían los recibos de la luz y el gas. Aumentarán la inversión y los empleos: Se crearán nuevos trabajos en los próximos años. Con las nuevas empresas habrá cerca de medio millón de empleos más en este sexenio y dos y medio millones más para 2025, en todo el país. Además, las empresas tendrán más y mejor energía, serán más competitivas, crecerán y podrán contratar a más personas, mejor capacitadas y con mejores salarios. Al tener gas más barato, también se podrán producir fertilizantes de mejor precio, lo que resultará en que México tendrá mayor producción de alimentos a mejores precios. Esta iniciativa reforzará la rectoría del Estado como propietario del petróleo y gas, y como regulador de la industria petrolera. Es momento, dijo el presidente Enrique Peña Nieto, de voltear al pasado para garantizar un mejor futuro para todo México.