No cumplió constructora con normatividad, no garantiza servicios públicos.

Por incumplir con documentos y estudio de factibilidad de introducción de servicios públicos, la Dirección de Inspección y Vigilancia del Ayuntamiento de Culiacán clausuró cuatro viviendas de lo que se pretende sea un fraccionamiento para policías y empleados estatales. Pastor Castañeda Verduzco, explicó que el expediente que presentó la constructora esta incompleto y carece de garantía para introducir en el área y casas agua potable y drenaje. Explicó que de acuerdo al reglamento de construcción el expediente se turna a comisiones y posteriormente en el pleno de cabildo se le da lectura y se aprueba o rechaza la solicitud de fraccionar, asunto que en este caso no ha sucedido. Acompañado por el director de vivienda del ayuntamiento, Gabriel Ballardo explicaron que los terrenos son propiedad de gobierno estatal y comprenden 98 hectáreas, de las cuales el INVIES cedió 31 para el proyecto. La obra esta a cargo de una constructora particular la cual debe asumir y garantizar el agua potable y drenaje, porque un fraccionamiento debe entregarse con todos los servicios. Por su parte el alcalde, Sergio Torres Félix aseguró que se actuó conforme a la normatividad y detalló que en Culiacán el reglamento no contempla permisos provisionales de construcción, y aseguró que de ninguna manera se pretende bloquear el proyecto. Recalcó estar dispuesto a dialogar con el secretario de seguridad pública, Genaro García para comprobarle que no se cumplió con el reglamento. Mientras, entrevistado vía telefónica por Las Noticias el director general de la constructora DIKSA , Fernando Córdova dio a conocer que desde inicios del mes de octubre entregó a la dirección de desarrollo urbano la documentación pero a la fecha no recibió respuesta. Aclaró que bajo los conceptos del artículo octavo constitucional la autoridad tiene dos meses para brindar una respuesta negativa o positiva, de lo contrario se da por cierta, motivo por el cual inicio con la construcción de las viviendas. Dio a conocer que envió documentos a JAPAC para la introducción de agua potable, sin embargo la paramunicipal le respondió que debido a los costos de momento es inviable brindar los servicios en este lugar. En este contexto, el director general de DIKSA especificó que están dispuestos a explotar los mantos freáticos y tener una propia planta de tratamientos de agua para beneficiar a las familias. Cabe señalar que los terrenos donde se pretenden construir las viviendas se encuentran en un predio entre Aguaruto y San Pedro. De acuerdo a información de la propia constructora serán mil 70 viviendas, la más económica será de 425 mil pesos, la más cara de un millón 400 mil pesos, todo mediante la banca privada y apoyos gubernamentales.