Millones de pesos que se destinan cada año para reparar los baches en las calles de culiacán, pareciera que son tirados directamente a la coladera, ya que en las primeras lluvias de la temporada, la mayoría de las calles en fraccionamientos y colonias de la periferia, lucen como zona de guerra.
La ciudadanía señala que el mal estado de las calles tiene dos orígenes, uno que el material utilizado tanto en la pavimentación como en la reparación de la carpeta asfáltica, no es de buena calidad, el otro origen es aun mas grave, el problema de las inundaciones y encharcamientos que afectan a la mayoría de los sectores de la ciudad por la falta de drenaje pluvial.