A una semana del regreso a clases siguen llenos los comercios proveedores de útiles escolares y uniformes.
Comparado con años anteriores ya no se hacen las filas que duraban horas en llegar al mostrador, sin embargo aún es abundante el flujo de personas.
Pese al calor o la lluvia, la humedad o la sed la persistencia caracteriza a las madres de familia.
Mientras las madres hacen todo lo posible por encontrar los artículos necesarios para el regreso a clases, algunos de sus hijos sí quieren ir a la escuela y otros no están muy entusiasmados.
Mientras los menores tienen opiniones divididas sobre ir o no a la escuela