La falta de agua es uno de los problemas que por años, se ha presentado en el Ejido Nicolás Bravo en Guaymas, lo que ha obligado a sus pobladores a batallar con el vital líquido.
El Ayuntamiento de Guaymas constató la problemática del poblado, acudiendo al lugar y observando que el poco que tiene 50 años de antigüedad estaba seco, por lo que decidió tomar cartas en el asunto.
Fue la Dirección de Desarrollo Social, la que gestionó los trabajos para perforar un pozo y que el agua les llegue de manera normal a los habitantes de dicho asentamiento rural.
La obra de perforación tiene un costo de un millón cien mil pesos y tendrá una profundidad de 200 metros.
Con el pozo se verán beneficiadas 750 familias y estará listo en 20 días aproximadamente.