Alumnos del jardín de niños Jesús G. Andrade, ubicado en la comunidad de el Carrizal II de la sindicatura de El Salado, toman clases en riesgo constante de que en algún momento, un pedazo del techo se desprenda y los pueda golpear.
La maestra del plantel, Marcela Vazquez Morales, dijo que según lo que han comentado los padres de familia, desde hace un año se hizo la gestión de apoyo ante el ayuntamiento de Culiacán, incluso los padres aportaron alrededor de 10 mil pesos a un programa en el que la administración aportaría otra suma para realizar la obra, sin embargo nunca se hicieron los trabajos, ahora les dicen que tienen que aportar 21 mil pesos mas para que se realice la obra.
La maestra del kínder dijo que desde hace un año se hizo la gestión de apoyo ante el ayuntamiento de Culiacán, incluso los padres aportaron alrededor de 10 mil pesos a un programa en el que la administración aportaría otra suma para realizar la obra, sin embargo nunca se realizaron los trabajos, ahora les dicen que tienen que aportar 21 mil pesos mas para que se realicen los trabajos.
El baño del plantel también se encuentra en mal estado, el techo se aprecia igual que el del salón de clases, en partes ya quedaron al descubierto las barillas, además que tienen que utilizar una cubeta porque la palanca para las descargas de agua no funciona.