A los dos años y medio de edad su cerebro convulsionó y perdió la capacidad auditiva, pues en medio de sacudimientos rítmicos sus tímpanos reventaron y en lo sucesivo no pudo continuar con una vida normal.
Al pequeño le daba temor andar solo y pocas veces socializaba, ya que se sentía incomodo ante la imposibilidad de escuchar y comunicarse con los demás.
La señora Cinthya Cristal Esquer Labrada, madre de Itam Antonio Quiñonez Esquer, refiere que el niño nació sano, pero después del episodio convulsivo tuvo que ser enviado a una escuela especial para menores con problemas acústicos.
Aún así, los problemas de aprendizaje y socialización de Itam permanecían vigentes, pues requería de un examen especial con un costo de cinco mil pesos y además 30 mil pesos para la adaptación de aparatos auditivos en ambos oídos, cantidad que estaba fuera del alcance de la familia de Itam.
Por fortuna su abuelita, Sandra Luz Escalante Moreno, tomó la iniciativa de solicitar la intervención del Diputado Omar Guillén Partida, quien respondió al llamado familiar y sufragó los gastos necesarios para que el pequeño volviera a escuchar.
Al llegar a la casa, la familia ya esperaba a Guillén Partida, quien después de saludar y preguntar por la salud del niño, mostró el auxiliar auditivo y se incorporó para colocarlo en el oído de Itam, quien de nuevo reconoció el mundo de los sonidos y con timidez contestó a las ansiosas preguntas de su mamá.
El legislador local también se contagió con la alegría que inundó el ambiente y dijo que la sensibilidad y solidaridad ante las necesidades de la comunidad, sobre todo de los sectores vulnerables, debería ser el sello característico de quienes incursionan en la política.
Los agradecimientos llegaron en cascada y el Diputado contestó que va por más de diez casos como el de Itam para ayudar a que los niño más necesitados tengan una mejor calidad de vida y un futuro prometedor para las familias.