Francisco Céspedes se auto describe como un “Loco”, ya sea por su elocuencia al hablar, porque habla y habla o por que dice verdades al tema que se exprese o le pregunten.
Mitad cubano, mitad mexicano. Mezcla que hace en él, que fluya el romanticismo y el ritmo, Céspedes es un artista que te envuelve en sus historias que convierte en canciones, quizá el “filin” que corre por sus venas es lo que atrapa, y lo que hizo que avivara esa noche en Culiacán, donde a partir de las 8:12 interpretó sus mejores canciones.
Demostró ser una persona sencilla e irreverente, más esbelto el cantante regresa a Culiacán, con una actitud fresca, acompañado de un gran sentido del humor.
Durante la noche de su concierto, que dio inicio al festival cultural de Sinaloa, “pancho” Céspedes bailó, bromeó con las personas y habló de sus recuerdos en cada canción, acción que atrapó al público, y ni el calor que amenazó la noche los detuvo de corear piezas clave de lo que lo llevaron al éxito como; “Donde está la vida” “Señora” y “Vida loca”.
Mientras unos coreaban algunos de sus temas, otros que no alcanzaron lugar, se sentaban en la barda o escalones del parque las riveras, para no perderse la magia del artista romántico.
Francisco Céspedes destacó en el doblaje, y la actuación, sin contar innumerables premios y reconocimientos como: “Artista Revelación Latino”, “Mejor solista masculino latino” y “Mejor Álbum Latino”.
Por eso y más, Francisco; Cantautor, y escritor de letras que empapa de sentimiento, fue el artista que abrió el festival de la cultura en Sinaloa; en una noche loca... loca.
