Por la noche, cuando todos esperaban el posicionamiento de la candidata del Partido Demócrata a la Presidencia de Estados Unidos, Hillary Clinton, respecto a los resultados de los comicios, apareció en su lugar la figura de John Podesta, jefe de su campaña, para invitar a los simpatizantes de la exsecretaria de Estado a irse a dormir.
La representante demócrata dijo que felicitó al presidente electo desde anoche y le ofreció trabajar en conjunto por su país. Además de esperar que el magnate sea un mandatario exitoso para todos los estadounidenses.
A pesar de señalar que esos no eran los resultados que esperaba y quería, además de que la nación mostró estar más dividida y polarizada de lo que pensaban, le pidió a sus seguidores darle el beneficio de la duda y la oportunidad de liderar al republicano Donald Trump.
Clinton aseguró que debe haber cabida en Estados Unidos para todos: sin importar género, raza o religión. El aplauso llegó después de afirmar que debe haber espacio para inmigrantes y discapacitados en el país. Su responsabilidad es ver por una nación más justa.
Hillary dijo que su responsabilidad como ciudadanos es continuar haciendo su parte para hacer un mejor país, además de más justo y fuerte. Después agradeció a Tim Kaine, su compañero de fórmula rumbo a la Presidencia, a Barack y Michelle Obama, y a su esposo Bill. La demócrata hizo hincapié en que juntos son más fuertes y que hay que ir hacia adelante.
“Donald Trump is going to be our president. We owe him an open mind and the chance to lead.” —Hillary
— Hillary Clinton (@HillaryClinton) 9 de noviembre de 2016
¿Qué les parece? ¿Creen que, en caso de que la situación hubiera sido al revés, Donald Trump hubiera aceptado de esta manera los resultados?
