Entre lágrimas, música y aplausos, amigos, familiares y autoridades municipales realizaron ayer un homenaje póstumo al actor mexicano Mario Almada Otero en la explanada del Palacio Municipal de Huatabampo, su tierra natal.
La guardia de honor frente a las cenizas y una fotografía del actor mexicano, quien este mes de noviembre cumpliría 50 años de carrera artística, inició a las 10:00 horas con el sonido de las trompetas.
Desde el Estado de Jalisco, Manuel de Luna, joven compositor, interpretó un corrido dedicado a Almada Otero, en el que describió la personalidad del actor e hizo remembranza de sus películas.
Luego del homenaje, una caravana de más de 200 personas acompañaron los restos del actor a la iglesia Cristo Rey de Huatabampo, donde después de la misa celebrada a las 12:00 horas fueron depositadas en un nicho.
Con lágrimas, sus hijos, nietos y bisnietos, dieron el último beso a la urna, donde se encontraban las cenizas de Mario Almada, para después depositarlas en un nicho, seguido de un largo aplauso por parte de los presentes.
Mario Almada Ruiz, hijo del actor, agradeció el cariño y admiración de todas las personas que acudieron a despedir a su padre.