Con llamativos colores y los siete conos que representan los pecados capitales las piñatas están listas para ser protagonistas de las posadas.
Sergio López todos los días elabora vistosas piñatas que coloca afuera de su negocio por la avenida Clouthier.
El precio depende del tamaño y las características, pero también elabora pedidos especiales.
A todas se les incluye el orificio para los dulces porque al final son la recompensa por vencer a la soberbia, avaricia, lujuria, ira, gula, envidia y pereza.