El pleno del Senado de la República aprobó reformas al Código Penal Federal y a la Ley Federal de Armas de Fuego y Explosivos, para sancionar hasta con 30 años de prisión a quien introduzca al territorio nacional en forma clandestina armas de fuego.
De esta forma se endurecen las actuales penas de cárcel y multas económicas a la posesión, acopio y tráfico de armas.
Se prevén de 10 a 15 años de cárcel, así como el decomiso, para los comerciantes de armas, municiones y explosivos, que los adquieran sin comprobar su procedencia legal.
Además, se sancionará con penas de tres a siete años de prisión a quien porte un arma sin tener la licencia correspondiente emitida por la Secretaría de la Defensa Nacional.
El dictamen fue remitido a la Cámara de Diputados.