El alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Zeid Ra’ad Al Husein, afirmó que el veto temporal del Presidente de Estados Unidos, Donald Trump, a la entrada de ciudadanos de siete países de mayoría musulmana, es “ilegal”, “malvado” y desperdicia recursos para la lucha contra el terrorismo.
“La discriminación basada en la nacionalidad únicamente está prohibida por el Derecho Humanitario”, señaló Zeid en un mensaje de la red social Twitter de su oficina.
En la cuenta de la Oficina de Derechos Humanos de la ONU, el alto comisionado, el responsable de más alto nivel de las Naciones Unidas en reaccionar hasta el momento directamente al veto de Trump, recalcó que “el veto estadounidense es también malvado y desperdicia los recursos necesarios para una lucha antiterrorista adecuada”.
Trump firmó el viernes una orden ejecutiva que suspende el programa de acogida de refugiados durante 120 días, con el fin declarado de revisar el procedimiento que se aplica y evitar la entrada de potenciales terroristas.
Por parte de la ONU, la Agencia para los Refugiados y la Organización Mundial de la Migración pidieron a Estados Unidos se mantenga “su larga tradición” de proteger a los que huyen de conflictos, pero evitaron criticar abiertamente la nueva política de restricción de entrada refugiados e inmigrantes al país.
En los últimos años, Estados Unidos ha sido uno de los países que ha admitido más refugiados para su reasentamiento, junto con Canadá, Australia y los países nórdicos.
Estados Unidos es igualmente el mayor contribuyente de la ACNUR, que financió con casi mil 500 millones de dólares el año pasado, muy por encima de la Unión Europea (341 millones), Alemania (284 millones) y Japón (164 millones), que le siguen.