Después de ser desaparecida por dos años el portalón de hierro forjado del campo nazi de concentración, fue devuelto a su lugar original.
La puerta con el lema Arbeit macht frei (el trabajo libera), fue robada en noviembre del 2014, y encontrada el pasado diciembre en la ciudad Bergen, Noruega.
El robo de este elemento icónico de los campos de concentración nazi, y el portalón del campo de Auschwitz con el lema a cada uno lo tuyo, que también fue robado, resulta un misterio, pues a pesar que la policía ofrecía una recompensa de 10 mil euros por dar con el elemento extraviado, no se descubrió si quien lo hurtó tenía relación neonazi o actuaban por encargo de algún coleccionista.
La puerta no será instala en su lugar original para evitar incidentes, pues el campo Dachau no tiene cámaras de vigilancia.
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