Giovani Mongiano, actor de 65 años de edad, se preparaba para su presentación en el Teatro del Popolo, en Gallarete, Italia, sin embargo, el auditorio estaba vacío.
La cajera del lugar se encargó de darle la noticia:
"Maestro no sé cómo decírselo, pero esta noche en la sala no hay ni una sola persona", dijo la trabajadora del teatro".
A lo que el actor con una carrera de 45 años, le contestó:
"Voy al escenario, el espectáculo de esta noche se hace igualmente".
La obra Improvisaciones de un actor que lee, la cual es de su autoría y él mismo ejecuta. Giovanni informó del programa como una obra que "Trata de una apasionada declaración de amor hacia el teatro, dedicada a los actores, que en la actualidad por pereza optan por leer cada vez más en el teatro, en lugar de estudiar e improvisar".
La presentación que brindó esa noche, la hizo con máximo empeño como si se tratara de un auditorio lleno.
El actor compartió a medio locales que no es la primera vez que le pasa, pues cuando era joven se presentó en Turín y sólo tuvo la asistencia de un bibliotecario, al cual le avisó que no se presentaría, pero el espectador dijo: "No, yo estoy aquí y quiero ver el espectáculo".
Mongiano señaló que el tener uno o 100 mil espectadores no debe ser diferencia para el actor, pues siempre hay que poner la misma carga de emoción y pasión que para una sala llena.
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