La hija de uno de los capos de la mafia italiana se quitó la vida después de que ninguno de sus amigos acudieran a su fiesta de graduación tras recientemente haberles revelado que su familia era parte del crimen organizado.
A pesar de que la joven María Rita Logiudice pertenecía a una de las organizaciones criminales más importantes, la joven de 24 años era considerada, dedicada al estudio y deseaba comenzar de cero, sin embargo, esas ganas no le alcanzaron para librarse del estigma.
Su padre Giovanni Logiudice, es un 'capo' en la organización 'Ndrangheta' en Calabria, investigada por múltiples asesinatos, extorsiones y venganzas. Gran parte de su familia, incluyendo su padre y tíos también tienen problemas con la justicia.
El rechazo social que generó su apellido se volvió intolerable y por eso decidió quitarse la vida.
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