Tras la captura de Joaquín Guzmán Loera, las autoridades de Estados Unidos y de la Procuraduría General de la República “nos hemos dado cuenta de que no usaba el sistema financiero, porque no hemos encontrado activos; ni ellos han podido encontrar un dólar”, declaró Raúl Cervantes, titular de la PGR.
Destacó que las autoridades mexicanas buscan “ir por activos y recuperación del dinero”, pero en México han encontrado pocos activos de Guzmán Loera, porque “no utilizaba el sistema financiero; siempre que buscábamos, sabíamos que no lo usaba”.
Raúl Cervantes explicó que son “mecánicas criminales trasnacionales de delincuencia organizada y corrupción”, por lo que es necesario “trabajar en colaboración con Colombia y Estados Unidos”.
La captura de Dámaso López, quien presuntamente quedaría a cargo del Cártel de Sinaloa, “fue un tema de inteligencia, hace unas semanas sabíamos que los podíamos detener en la Ciudad de México”.
Reconoció que el detenido y otros personajes relacionados con actividades delincuenciales “pueden venir a la Ciudad de México por logística o por temas financieros”, en el caso de Dámaso López Núñez, “sabíamos que viajaba de la Ciudad de México a Sinaloa o al revés”.
Cervantes reveló que sigue la investigación de inteligencia y “vamos por su red y por su grupo cercano”.
Afirmó que, en reuniones con autoridades de Colombia, han detectado que “el fenómeno delincuencial del narco ha cambiado, los cárteles han cambiado, y los líderes de los cárteles que antes tenían una vigencia de alrededor de dos a cinco años, ahora tienen un promedio de vida de 14 meses, por lo que se tienen que diluir más en la sociedad, lo que hace cambiar la inteligencia del movimiento para su detención”.
Consideró que el jefe de Gobierno, Miguel Ángel Mancera, “tiene razón, cruzan por la Ciudad de México, pueden venir a atender asuntos, están de visita, pero no hay cárteles dominando territorios”.
El procurador puso como ejemplo el caso de Colombia, donde “cuando el interior del país se puso mal, Bogotá se fortaleció; los capos iban a Bogotá, pero no operaban allí”. Aunque advirtió que las actividades del narcomenudeo sí pueden multiplicarse y buscar generar más adicción, por lo que “se debe poner atención al tema de salud pública”.
Raúl Cervantes dijo que en el caso de Dámaso “hay una petición de extradición a Estados Unidos” y, debido a la relación binacional en materia de justicia, “estamos analizando si lo extraditamos. Vamos a ver si procede”.
En el caso del otro detenido, Víctor González, “es experto en lavado de dinero, y buscamos ir contra los activos”.
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