Uno de los cetáceos que ha sufrido en mayor medida las terribles consecuencias de las pesca ilegal durante los últimos años es la vaquita marina. Debido a que este mamífero marino tiene como uno de sus principales hábitats las aguas cercanas a Baja California, las autoridades ambientales mexicanas ya han tomado diversas medidas para proteger a la vaquita de su extinción.
Debido a las dificultades presentadas al momento de rastrear a los ejemplares de este cetáceo, las autoridades mexicanas contarán con la colaboración de tres delfines entrenados por la Armada de Estados Unidos, quienes guiarán a cada vaquita al santuario. Pacchiano estima que al término de este año, se podrá evaluar si este proyecto ha podido lograr el éxito deseado.
Una de los peores momentos para la supervivencia de la vaquita se presentó en hace tres años, cuando la población de 200 ejemplares se redujo a la mitad. Ahora, diversas organizaciones ambientales estiman que sólo existen un poco más de 30 vaquitas. Recientemente, el actor Leonardo DiCaprio hizo un llamado al presidente mexicano, Enrique Peña Nieto, para que emprenda más acciones para proteger al cetáceo más pequeño de nuestro planeta.
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