La bloguera y madre de Luisiana (Estados Unidos) Chrissy Roussel publicó en Facebook una fotografía de sus hijos y los de sus hermanos. En la imagen aparecen los 17 primos, usando camisetas muy especiales: cada camiseta lleva un número que indica el orden de nacimiento y un color que señala cuáles son hermanos.
"Los niños crecen tan rápido que intentamos capturar momentos como este, en el que están todos juntos, siempre que podemos", explica Chrissy al HuffPost EE UU. "Como no se llevan muchos años, pensamos que sería divertido que se pusieran en fila, ordenados de mayor a menor".
Según la madre, su hermana Maryellen sugirió que los niños llevaran camisetas con números. "Elegimos el color de nuestras camisetas y ella planchó los números", aclara Chrissy.
Esta foto es un tributo al difunto padre de Chrissy, que falleció hace tres años. Poco después de que muriera, Chrissy se enteró de que estaba embarazada de trillizas y de que dos de sus cuñadas también estaban embarazadas.
En su familia, llaman a los cinco pequeños "los Frederick Five" en honor a su abuelo, Frederick Michael Fox Jr.
"Han traído mucha alegría y felicidad a la familia cuando más lo necesitábamos. Es una pena que no llegaran a conocer a su abuelo", comenta Chrissy. "En los 17 niños que aparecen en la fotografía queda reflejado el amor que tenían mis padres. Creemos que este —sus nietos— es su mayor legado. En mi opinión, es el tipo de legado que cualquiera querría dejar".
Las edades de los 17 nietos van de los 2 a los 14 años. La cuñada de Chrissy, Katie Fox (de Annabelle Rose Photography), fue la que hizo las fotos y los niños se lo pasaron en grande.
"Cada uno se colocaba en su posición cuando decíamos los números", recuerda Chrissy. "Para ellos fue muy divertido".
La página de Facebook Love What Matters también compartió la fotografía, que ya ha recibido más de 30.000 me gusta.
A modo de título de la imagen, Chrissy escribe: "Cuando miro a los 17 nietos de mis padres, me fijo especialmente en esos cinco niños arcoíris que han traído tanta alegría en los meses y los años posteriores a la muerte de mi padre. Le echamos mucho de menos, pero notamos su presencia día tras día, a través del amor y la alegría de estos niños".
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