La pasión por el fútbol puede ser inexplicable para muchos, pero para el pequeño Bradley Lowery era el principal motor en su partido contra el cáncer, el cual, desgraciadamente metió el último gol este viernes 7 de julio.
El pequeño de seis años, quien fue diagnosticado a sus 18 meses con el extraño cáncer neuroblastoma, era fanático del club de fútbol inglés Sunderland y su héroe era el entonces delantero del equipo Jermain Defoe.
La historia de Bradley conmovió a miles de personas el año pasado, quienes donaron más de 900 mil dólares para que el niño recibiera un tratamiento con anticuerpos en Nueva York, pero desde hace meses sus padres recibieron la noticia de que el partido del pequeño estaba por terminar.
Así, en febrero inició una especial relación entre el equipo británico y Bradley, cuando en febrero el mismo Defoe y sus compañeros John O'Shea, Sebastian Larsson y Vito Mannone, acudieron al hospital para visitar al niño. Esa noche Defoe rehusó dejar al pequeño que lo rodeaba con sus brazos débil y pasó la noche en el hospital haciéndole compañía.
.@Bradleysfight The Lads loved catching up with him pic.twitter.com/43CZkEPbFo
— Sunderland AFC (@SunderlandAFC) 9 de febrero de 2017
De ahí en adelante, se volvieron inseparables. El futbolista, que ahora juega para el Bournemouth, se convirtió en su mejor amigo, no sólo compartiendo momentos especiales con el dentro de la cancha sino encuentros personales con la familia.
El sueño de Bradley se hizo realidad en marzo cuando apareció con el equipo de fútbol de Inglaterra en el estadio de Wembley antes del partido contra Lituania en el que Defoe anotó un gol.
El martes 4 de julio fue su cumpleaños y su famoso amigo no sólo lo sorprendió con un emotivo collage de fotos juntos que publicó en su cuenta de Twitter sino que se presentó en la fiesta de cumpleaños, la cual tristemente se convirtió en su última despedida.
Happy Birthday to my best mate @Bradleysfight. Hope you have a special day and I'll see you later this week... #HappyBirthdayBrad pic.twitter.com/ugokGgdMS9
— Jermain Defoe (@IAmJermainDefoe) 17 de mayo de 2017
Hace unos días durante una conferencia de prensa Defoe no pudo contener la emoción ni el llanto al ser cuestionado sobre la especial amistad con el pequeño y su situación de salud.
“Es muy duro. Hablo con la familia todos los días y hace unos días estuve con él. Fue duro verle sufrir de esa manera. Es cuestión de días. Siempre estará en mi corazón y no hay día que pase sin que me levante y mire mi teléfono o piense en Bradley. Su amor puedo verlo en sus ojos cuando me mira”, expresó el futbolista.
Hoy, 7 de julio, los ojos de Bradley dejaron de brillar, pero su amor por el juego y la vida permanecen no sólo en aquellos que llegaron a conocerlos personalmente, sino en todos los que siguieron la historia de su bella amistad con el futbolista.
Sin duda, la Premier League está de luto.
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