Febrero está por comenzar y además de la atmósfera romántica del Día de San Valentín, el espíritu fiestero del carnaval también llega al País, donde se celebran por lo menos 10 carnavales en diferentes ciudades.
A continuación, conoce los cinco carnavales de México que no te debes de perder.
Carnaval de Mazatlán
Es uno de los más famosos y se caracteriza por su Combate Naval, una representación pirotécnica de la defensa del puerto ante las fuerzas francesa en 1864, y cuenta con su propio himno, conocido como los Papaquis, una pieza musical que se acostumbra tocar antes de iniciar el desfile de carros alegóricos y carrozas a lo largo de los 21 kilómetros de su malecón. Además, no sólo cuenta con una reina de la fiesta sino que le rinde homenaje a la cultura al coronar a su reina de los Juegos Florales como embajadora de las artes.
Carnaval de Veracruz
Esta tradición viene desde los tiempos de la colonia y es considerada una de las más alegres del País. En Veracruz la fiesta se caracteriza, al igual que el de Mazatlán, por iniciar con su Quema del Mal Humor, donde se prende fuego a la figura de un personaje o suceso que sea de disgusto popular, usualmente un personaje político. También cuenta con una reina del Carnaval y un Rey de la Alegría, pero destaca que en la categoría infantil se corona a un niño y una niña y no sólo a una reina como en otros carnavales. Además, concluye con la tradición del entierro de Juan Carnaval, un personaje ficticio que representa esa semana de fiestas y diversión. Durante la “ceremonia funeraria” se hace una divertida lectura sobre su testamento y los Reyes del carnaval asisten vestidos en color negro, señal de luto.
Carnaval de Campeche
Sus orígenes datan de 1582 cuando por órdenes del Gobernador español de la provincia: Guillén de las Casas, se proclamó la fiesta. También cuenta con una reina oficial, la cual en sus inicios era llamada Lucero o Flor del Carnaval. A diferencia de los carnavales de Mazatlán y Veracruz que inician con la Quema del Mal Humor, los campechanos entierran a la figura del personaje seleccionado como una forma de “enterrar los malos pensamientos” o “mala vibras”. Su carros alegóricos destacan por ir adornados de flores, en lo que se conoce precisamente como el Festival de la Flores, y los niños disfrutan del Lunes de Mojadera cuando las guerras con globos de agua reinan en las calles.
Carnaval de Tlaxcala
Este carnaval destaca por ser una mezcla de lo indígena y lo europeo, pues en 1699 el Gobernador de la Provincia, el Duque de San Román, declaró que los idiomas oficiales fueran el náhuatl y el castellano. Debido a esto las danzas prehispánicas se fusionaron con la música europea y continúan adaptándose a los tiempos modernos. Aquí, la Quema del Mal Humor lleva por nombre Tormento del Tragafuegos, y consiste en quemar a la figura particularmente de pies a cabeza. A los danzantes que forman parte de las comparsas se les suele llamar huehues o viejitos, ellos portan sombreros con plumas que representan el penacho indígena.
Carnaval de Mérida
Es una fiesta llena de color que se caracteriza por su Batalla de las Flores, en donde los asistentes disfrutan de una pequeña “guerra” donde las principales armas son pétalos o capullos de flores. Al igual que los carnavales anteriormente mencionados cuenta con un desfile alegórico que recientemente incluye también figuras aéreas y por supuesto la carroza real de la reina. Durante la fiesta se destacan los ritmos de bachata y los grandes tocados de plumas entre las comparsas.
Notas de interés:
