En un supuesto ritual, una mujer asesinó y mutiló a su hijo de ocho meses, para presuntamente ofrendar su cadáver al Diablo.
En el lugar del crimen, la Policía encontró un pentagrama marcado en el piso con la silueta del niño pintada en negro. Además había veladoras, un cráneo humano, figuras de diablos, chivos, aceites y otros objetos esotéricos.
Su ex la denunció. También estaban los restos del menor, a quien ella llamaba Belcebú y no había sido registrado.
Según quedó asentado en la carpeta de investigación NEZ/CHI/026/23007/18/01, a finales de enero un hombre denunció que Leticia “N”, su ex pareja sentimental, porque no le permitía ver a su hijo.
Ante la Autoridad Ministerial dijo que temía por la vida del pequeño, pues por sus vecinos supo que ella y su nueva pareja, un hombre al que identificó como Axel, lo maltrataban. Agentes municipales iniciaron la investigación, pero en las ocasiones que la buscaron en su vivienda, en el Barrio Tlatel, no tuvieron suerte. Por eso solicitaron una orden de cateo.
El pasado 4 de febrero los agentes irrumpieron en la casa de Leticia amparados en la orden del juez.
Durante el cateo hallaron ropa del niño y sus cobijas. Ella, quien vestía de negro, primero trató de ocultar el asesinato y dijo que no sabía dónde estaba el bebé.
Pero durante la inspección se detectaron restos de sangre y finalmente el cuerpo mutilado del menor.
Su pareja y quien aparentemente la ayudó en el supuesto rito satánico, no fue localizado en el lugar, pero ya es buscado por las autoridades.
El asesinato ocurrió en una vivienda del municipio de Chimalhuacán y la imputada Leticia fue enviada a prisión y ya fue vinculada a proceso.
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