En el Alto Golfo de California, las familias de dos comunidades que viven de la pesca llevan tres meses sin dinero. Tienen prohibido salir al mar como medida para proteger a la Vaquita Marina y el Gobierno federal no cumplió con el compromiso de pagarles la compensación económica a cambio de esta prohibición.
En San Felipe está prohibido pescar desde hace tres años. Aquí, 80 por ciento de la población vive de esa actividad. El resto de los habitantes se dedica al turismo, pero tampoco pueden navegar, para no poner en riesgo a la vaquita marina que está al borde de la extinción.
Sin pesca ni navegación el panorama es poco alentador. Los pescadores legales mantienen guardadas sus lanchas y sus redes. En diciembre les llegó el último pago de la compensación, pero siguen sin permitirles salir al mar.
Los pescadores del Alto Golfo exigen respuesta de las autoridades, dicen que romperán el acuerdo con el Gobierno federal si no les garantiza que tendrán dinero para vivir.
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