Aunque la previsión era que habría mucho menos viajeros en tránsito, de lo que es normal en semana santa en la central camionera de Mazatlán, lo cierto es que el domingo a media mañana ya había una gran cantidad de personas queriendo salir de la ciudad.
Pocos eran los que llegaban al puerto luego de que terminaban los días mas fuertes de vacaciones de semana santa.
Y contrario a lo que podía esperarse, que la salida masiva se diera a partir de la tarde noche, la mañana del domingo cientos de turistas llenaban la terminal terrestre.
Era común ver maletas por el piso..gente desesperada haciendo filas para comprar boletos o para confirmar el número del camión que no estaba en el pasaje que habían comprado con anticipación.
Los que hacían pensar que fueron previsores y no deseaban encontrarse con la dificultad de salir de la ciudad cuando hubiera grandes cantidades de vacacionistas queriendo hacer lo mismo, abarrotaron desde temprano además de las taquillas, de la central camionera, la sala de espera, que realmente ofrecía espacio insuficiente para la demanda de los que querían sentarse a hacer tiempo mientras llegaba su camión.
