Este próximo 30 de abril llega la "Luna rosada" a los cielos, así se le conoce a la primera luna llena después del equinoccio de primavera, pero no, la luna no se pintará de rosa en el cielo, sino que así fue nombrada por los nativos americanos en honor a las primeras flores que traía consigo la primavera, así como también la aparición del musgo rosado.
Algunas otras tribus también la llaman "Luna Llena Pescado", ya que coincide con el momento en que ciertos peces comenzaban a nadar río arriba para desovar.
A este fenómeno también se le conoce como "Luna de Miel" o "Luna de Fresa".
Aunque no se ponga a brillar con ese color, una Luna Llena siempre es una buena ocasión para salir a la calle, buscar un sitio apartado de la gran ciudad y disfrutar con el siempre fascinante espectáculo del cielo.
- Si vives en el centro de una gran ciudad, no esperes ver gran cosa. Planéalo, deja atrás la contaminación lumínica y disfruta del firmamento en todo su esplendor.
- Resérvate unas horas. Mirar la Luna llena durante un instante está bien, pero es muchísimo mejor tener tiempo para ver cómo viaja por el cielo y cómo, a veces, su color cambia levemente.
- No te hacen falta muchos aparatos. Mejor cuanto menor sea el instrumental,pero no hay que dejar de echar un vistazo aunque no se cuente con un telescopio de alta gama.
- La fase de la Luna llena no es la mejor para echarle un vistazo al resto de la geografía lunar, pero puedes plantearte como un reto el de buscar alguno de las decenas de montañas, mares, lagos y cráteres que han quedado marcados en la superficie del astro.
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