Los cuidados íntimos son de suma importancia ya que la aparición de infecciones vaginales te pueden atormentar de una manera extrema. En algunas ocasiones aparecen molestias en tu vagina que no tienes ni la más mínima idea de cómo sucedió y la verdad es que pueden producirse de las maneras que menos te imaginas, así como con tus hábitos cotidianos o con cosas que ves completamente normal como quedarte con el traje de baño por horas o incluso por depilarte.
Así que no te confíes porque puede que haya algo que no estés haciendo bien. Tu flora vaginal es muy frágil y aunque nunca hayas vivido una infección urinaria u hongos, lo más mínimo puede ocasionar que aparezca una de éstas. Para que tengas cuidado, te dejamos algunas cosas que tu vagina odia que hagas aunque no te lo haya hecho saber aún.
1- La ropa interior de lycra
Tu ropa interior puede ser la mejor amiga o peor enemiga de tu vagina, ya que están en contacto directo durante muchísimas horas, por lo que es importante que escojas bien los calzoncillos indicados. Existen tangas, ropa interior de encaje o lycra que pueden causar roces e irritaciones debido a que siempre están en movimiento. Por ello, si tu flora vaginal está dañada o quieres prevenir que se dañe, lo más saludable es que uses ropa interior hecha de algodón.
2- Usar toallas protectoras
Acumular humedad es la peor decisión que le puedes regalar a tu vagina, ya que creas el ambiente perfecto para que se instalen hongos y bacterias que alteran tu pH. Es normal que sientas miedo en manchar tu ropa interior con flujo, pero son mucho peor las infecciones ocasionadas por los salvaslips. Es importante que tu zona íntima transpire y las toallitas protectoras no ayudan en esto.
3- Algunos medicamentos
Los medicamentos como los antibióticos pueden desequilibrar el pH de tu zona íntima cuando se toman de manera frecuente debido a una gripe o alguna otra enfermedad. Los antihistamínicos, normalmente son aplicados para combatir alergias; resecan la mucosa nasal y las lágrimas constantes, y los más fuertes también pueden resecar tu vagina.
4- Trajes de baño mojados
Mantenerte mucho tiempo con los trajes de baño mojados son una gran puerta para darle paso a los hongos, ya que tus labios vaginales estarán más húmedos por un largo tiempo. Intenta llevar ropa interior de repuesto y cambiarte cuanto antes si ya no piensas meterte al agua otra vez. El cloro de las piscinas tampoco es de gran ayuda para tu vagina, ya que perjudica a tu pH y a tu piel.
5- Juguetes sexuales
No tiene nada de malo utilizar juguetes sexuales, el problema es que no tengas higiene al utilizarlos. Es importante que limpies tus juguetes después de usarlos y que tu diversión no termine en una infección de orina. Basta con que los limpies con agua y jabón neutro.
6- Consumo excesivo de azúcar
El hongo cándida se alimenta de los carbohidratos refinados como lo es la harina blanca que se encuentra en el pan y en las galletas, y el azúcar provoca el desarrollo de bacterias que compensan la cantidad de hongos. Por lo que el consumo en exceso de alimentos que contengan azúcar puede desequilibrar tu flora y aparecer una infección. Por la misma situación, las mujeres que padecen diabetes son más propensas de sufrirlas.
7- La depilación
Muchas mujeres creen que por depilarse o afeitarse su zona íntima aumenta su nivel de higiene corporal, pero es un error. El vello púbico protege los genitales, por lo que depilarse puede provocar irritación e infecciones. Ese conjunto de vellos que probablemente no te gustan, son una barrera natural para disminuir el contacto con virus y bacterias, además de que también ayudan a controlar la humedad de tu vagina.
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