Un experimento
que se realizó en 240 empleados de la compañía de servicios financieros
Perpetual Guardian en Nueva Zelanda, donde midieron la productividad,
motivación y rendimiento personal con base a una semana laboral de 4 días durante 8 semanas, arrojó resultados son
increíbles.
En marzo de 2018, la compañía decidió darles un día libre cada semana a
su personal, las cuales su remuneración como las demás condiciones de
empleo quedaron sin cambios, y, a través de un acuerdo en la cual decía que
debían trabajar 30 horas y entregar la misma cantidad de producción de una
semana estándar revelaron que los
puntajes en liderazgo, estímulo, empoderamiento y compromiso crecieron a
comparación con los expuestos en el año 2017.
Uno de los resultados demostró que el personal logró realizar el trabajo de 5 días en 4, ya que la productividad creció un 20%, porque se concentraron a desarrollar y finalizar el trabajo, como reducir el tiempo de las reuniones de 1 hora a 30 minutos. De estas reuniones se concluyó que no había diferencia en los resultados alcanzados.
Otro de los resultados fue que los
empleados lograron balancear su vida privada con la laboral ya que aumentó del
54% al 78%. Con un día libre más, se involucraron con sus familias, amigos y
comunidad. También, los niveles de
estrés disminuyeron de un 45% al 38%.
Finalmente, el compromiso de los
empleados con su empresa aumentó un 40%, debido que como afirma la jefa de
Personal y Habilidades de la empresa, “tuvieron
éxito al empoderar al personal”.
Fuente: BBC
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