Como consecuencia de la sobreproducción de garbanzo que tuvo Sinaloa en el ciclo agrícola 2017-2018, cuando se establecieron mas de 94 mil hectáreas , el precio del grano de exportación enfrentó una caída en el precio de 21 mil pesos por tonelada a poco mas de 7 mil pesos.
Sin embargo, otro aspecto fundamental para que los productores garbanceros de Sinaloa no alcanzaran un precio rentable, ha sido el abandono de las autoridades estatales y federales para aplicar un política de apoyos y el desmantelamiento de la Unión Nacional de Productores y Exportadores de Garbanzo, la UNPEG, organismo que en su momento fue el rector de las exportaciones y que hoy en día es una organización con múltiples deudas y declarada en quiebra, situación que benefició a los empresarios bodegueros particulares para llenar ese hueco del mercado, sin embargo la Asociación de Agricultores del Río Mocorito forzosamente tuvo que adoptar el programa de exportaciones.
Tan solo por mencionar una cifra, la empresa JOVA GRANEROS se jacta en una publicación de una revista financiera , ser la empresa que mas garbanzo exportó en 2018 y para 2019 estima ventas por mas de 60 millones de dólares tan solo en garbanzo.
Las organizaciones de productores tan sociales como privadas no han sido capaces de realizar una defensa por los productores de garbanzo que siguen a expensas de unos cuantos acopiadores que pagan barato y venden caro , registrando las mayores utilidades.
Para este temporada en Sinaloa se estima una producción de riego y temporal de 60 mil toneladas y un precio de entre 18 mil y 20 mil pesos por tonelada.
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