México, entre los países con más estafas por correo a solicitantes de empleos

Las estafas online atacan a todos los rubros de negocios. Y en los últimos años se ha desarrollado un fenómeno que consiste en robar información vía correo electrónico a aquellas personas que se encuentran en la búsqueda de empleo. ¿Cómo funciona este modelo de estafa que tantos problemas causa en México?

 De acuerdo con una investigación de Kaspersky Lab —una empresa de seguridad informática rusa—, en lo que va del 2019 se ha registrado una enorme cantidad de correos electrónicos no deseados (spam) con ofertas de trabajo falsas. El trabajo es casi tan perfecto que muchas personas han caído en estos engaños.

Los delincuentes cibernéticos enviaban mensajes que parecían provenir de los sectores de recursos humanos de grandes compañías. De esta manera, captaban rápidamente la atención de potenciales trabajadores. Una vez que caían en la trampa, les pedían que descarguen un aplicativo que en realidad era un malware. De esta manera, accedían a su información personal para luego robarles dinero.

 La investigación de la corporación rusa arrojó resultados del primer trimestre del año. El informe muestra que a través de los spam explicaban a los usuarios que la app que descargaban les servía para acceder a la base de datos de búsqueda de empleo. Para que parezca más verídico, durante el proceso aparecían mensajes que notificaban a la víctima que sería redirigido a un sitio web de una de las empresas más grandes de reclutamiento.

Ya en la página web, el siguiente paso era descargar en el dispositivo un virus de tipo troyano. De acuerdo con Kaspersky Lab, el método era tan minucioso que resultaba difícil darse cuenta que se trataba de una estafa. ¿Qué hacer para reconocerlo? El error estaba en la línea de dirección del correo electrónico.

 De acuerdo con Hostalpaca, antes de abrir un correo electrónico no deseado y ser víctima de phishing (robo de información online), debemos tener en cuenta que la información que muestran es en realidad verdadera, y no una suplantación. Requiere de minuciosidad, pues cualquier persona puede caer en las trampas.

 Comprobar la dirección. Debemos siempre revisar que la dirección web al cual nos redirigen es auténtico, y no de un momento a otro cambie el enlace, o cubra un hipervínculo extraño. Esta práctica es bastante común, incluso para mostrar publicidad engañosa.

1. No abra spam. La curiosidad mató al gato. Por más que recibamos cientos de mensajes que provengan de organizaciones o personas que desconocemos, debemos evitar abrirlos. En ocasiones solo un mensaje puede provocar que se instale un virus sin permiso. Una buena opción es revisar que el link al cual ingresamos empiece con ‘https’, sobre todo si nos pide información financiera.
2. Revise el sitio oficial. Otra opción que podemos seguir es ingresar a la página web oficial del sitio, para garantizar que en realidad existen vacantes disponibles para los empleos que ofrecen. Más aún si no conocemos mucho de la compañía, comprobaremos si en realidad existe.
3. Llame por teléfono. Si todavía nos quedan dudas, podemos comunicarnos con la empresa en cuestión para preguntar que la oferta laboral realmente está en pie, y evitar llevarnos desagradables sorpresas después.
4. Sea minucioso. Hay que verificar al detalle posibles errores en el nombre de la empresa o el título del empleo. Los avisos falsos suelen tener pequeños cambios en estos aspectos, o en el nombre del correo electrónico.

 Como vemos, es necesario analizar bien los correos antes de abrirlos, y verificar al 100 por ciento que las páginas web sean confiables, sobre todo si piden información bancaria. Este sector es gran objetivo de los estafadores online. Debemos tener cuidado, ya que México es junto a Brasil el país más atacado por correos maliciosos en Latinoamérica.