Miguel Soto Gaxiola, párroco de la iglesia de Nuestra Señora del Carmen, expresó que se busca fortalecer los lazos familiares como jefes de familia hombre y mujer.
Dijo que no se puede llamar matrimonio a la unión de hombre-hombre, mujer-mujer, por lo que sugirió a los legisladores realizar modificaciones a ley con otra figura jurídica donde se les otorguen los derechos que el grupo de la diversidad sexual ha estado solicitando.
Soto Gaxiola, puntualizó que como religión en ningún momento se le ha discriminado a la comunidad LGBT.
El sacerdote, comento que el análisis del trabajo que presenten los legisladores se podría reflejar en las urnas.
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