El calor ha hecho de las suyas, no sólo para quienes trabajan a la intemperie, para las niñas y niños, pero sobre todo para los adultos mayores, incluso los que se encuentran refugiados, tal es el caso de los habitantes de Una Gota en El Oceáno de Mazatlán.
Debido a su estructura hecha de lámina galvanizada, dentro de los dormitorios del albergue los beneficiarios soportan una sensación térmica por encima de los 40 grados centígrados, sólo con ventiladores encendidos, por lo que el sitio urge el apoyo de las autoridades, de la iniciativa privada y de la propia ciudadanía para la compra de aires acondicionados, una reducción en el pago de energía eléctrica y con ello evitar la muerte por 'golpe de calor'.
Héctor Miguel Torres Guzmán, encargado del sitio que estuvo al cuidado de Luis Alberto López Pérez por al menos cuatro años, se mantiene pendiente ahora de 14 personas, entre adultos mayores y mujeres encontradas en situación de indigentes requiriendo además de apoyo para la manutención, pues sobreviven a través de donativos.
Torres Guzmán reveló que el albergue recibe a personas en estado de abandono siempre y cuando no padezcan de esquizofrenia o alguna enfermedad contagiosa, llegando a dar ascilo a pacientes con hipertensión, con nivel de glucosa alto, con cirrosis hepática, amputados de pierna o desarrollando cuadros severos respiratorios como ocurrió con El Buto.
Si usted quiere apoyar a este lugar, puede hacerlo llevando sus donativos directamente a las instalaciones de Una Gota En El Oceáno ubicadas en la calle Bahía María Magdalena en la colonia Rincón de Urías, o llamando al teléfono 98548 58, entre las mayores carencias están pañales para adulto, galletas, azúcar, leche, productos de higiene y limpieza personal.
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