Este
martes 27 de agosto, miles de alumnos de todos los niveles educativos
regresaron a las aulas, algunos ingresaron por primera vez al ciclo
escolar.
Como
en cada inicio, los más afectados son los pequeños de preescolar y
primaria, pues es una experiencia nueva en su vida, donde se
encuentran con nuevos compañeros y maestros, y se alejan de los
padres.
En
las diferentes instituciones académicas, desde las 8:00 de la mañana,
se podía observar a los menores, en su mayoría niños de primaria,
contentos por regresar a sus salones y compartir sus actividades de
vacaciones con sus amigos, mientras que sus padres se mostraban
tranquilos de ver a sus hijos felices de regresar a la escuela.
Contentos
de mostrar sus nuevos uniformes, moños, mochilas y demás artículos escolares.
Los
directivos y maestros aprovechaban para dar la bienvenida a los
alumnos y dar algunos avisos y comunicados a los padres.
Por
otro lado, decenas de lagrimas y gritos, se podían ver y escuchar en
las instituciones de preescolar, lugar donde además de los menores,
los padres también sufrían.
Afuera
de las aulas y pasillos, se podían ver a los padres intentando
consolar a sus pequeños, quienes se negaban a ingresar a sus nuevas
aulas y separarse de papá o mamá.
Principalmente
madres de familia, optaban por ver a sus hijos desde las ventanas,
motivandolos a quedarse con sus nuevos compañeros.
Luego
de varios minutos, los llantos cesaban y los menores lograban
integrarse al grupo escolar.
Algunos felices, otros resignados al inicio de lo que será un año de ciclo escolar.
