Ante el azote de los fuertes vientos y precipitaciones que trajo “Narda” a Mazatlán, en la zona del muelle del Parque Bonfil, las embarcaciones que se amarraron en puerto y que permanecieron resguardadas por el mal tiempo, fueron aseguradas por pescadores que aún con las inclemencias del tiempo, realizaron labores de aseguramiento de artes de pesca y tangones, a fin de evitar daños severos a la infraestructura de los barcos amarrados.
Desafiando a la naturaleza, los pescadores realizaron labores de alto riesgo en la zona donde permanecen amarrados los barcos camaroneros, pues el mantener seguros algunas partes de las embarcaciones, protege a los pescadores y otros barcos de sufrir riesgos de accidentes.
Otros pescadores hicieron frente al fuerte oleaje que cada vez se intensificaba con el azote de los intensos vientos.
Jesús Omar Lizárraga, Presidente de la Unión de Armadores del Litoral del Pacífico, dio a conocer que desde las primeras horas de este 30 de septiembre, muchas embarcaciones comenzaron a resguardarse en los distintos muelles del Estado; sin embargo aseguró que están atentos de las indicaciones de la Secretaría de Marina para resguardar la vida de los pescadores que se hicieron a la mar.
Cabe destacar que este 30 de septiembre se levantó la veda del camarón en el pacífico y en estas condiciones la mayoría de las embarcaciones se encontraban en los puntos de captura, por lo que procedieron a mantenerse a salvo en los puertos más cercanos.
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