Crece la incertidumbre entre los productores agrícolas ante la falta de reglas de operación de la nueva financiera denominada Finagro y las tasas de interés con las cuales habrá de operar para el sector, ya que actualmente la Financiera Nacional está cobrando entre el 16.5 y 18 por ciento, lo cual es una desventaja para los pequeños agricultores.
El coordinador del CAP Agustín Espinoza Lagunas señaló que hay un panorama pesimista para la agricultura comercial con las políticas públicas del Gobierno federal, la desarticulación del aparato productivo y de las dependencias relacionadas con los apoyos y esquemas para la comercialización de granos a nivel nacional.
El dirigente campesino también expuso que la falta de reglas claras , la carencia de subsidios y apoyos para compensar los bajos precios, son factores para que los productores de maíz principalmente, vuelvan a ser víctimas de la voracidad de empresarios acopiadores y industriales.
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