La atleta mexicana Guadalupe "Lupe" González, que vio ratificada por el Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS) la sanción de cuatro años por dopaje que le impuso la Federación Internacional de Atletismo (World Athletics), se enfrenta a una nueva investigación, tras ser acusada por la Unidad de Integridad del Atletismo (AIU) de presentar “pruebas falsas” durante el proceso.
El Tribunal Disciplinario de la Federación Internacional de Atletismo decidió suspender durante cuatro años a la marchadora mexicana, la sanción, que comienza a contar desde el 16 de noviembre de 2018, a la que se podría añadir una nueva si se confirman las acusaciones de la AIU por presentar “pruebas falsas” durante el proceso.
Guadalupe González, dio positivo por Trembolone, un esteroide anabolizante incluido en la lista de sustancias prohibidas, en un control antidopaje fuera de competición realizado el 17 de octubre de 2018.
La marchadora mexicana, plata en los Mundiales de Londres 2017, se defendió aduciendo que la sustancia prohibida había llegado a su cuerpo como consecuencia del consumo de “carne contaminada” en los días previos a la realización del control antidopaje.
Un argumento que no convenció al Tribunal Disciplinario de la Federación Internacional de Atletismo, que el 9 de mayo de 2019 impuso una sanción de cuatro años por dopaje, así como la anulación de todos sus resultados deportivos posteriores al 17 de octubre de 2018. G
uadalupe García recurrió la sentencia ante el Tribunal de Arbitraje Deportivo, que el pasado 2 de julio, como se hizo público este martes, desestimó la apelación presentada por la mexicana.
La sanción impedirá a González participar en los próximos Juegos Olímpicos de Tokio, aunque Guadalupe García seguirá contando con las dos medallas de plata que logró en los Juegos de Río 2016 y los Mundiales de Londres 2017.
Información: EFE