Después de casi 24 horas de haber permanecido cerrado a embarcaciones menores de 500 unidades de arque bruto, el puerto finalmente fue reabierto a toda la comunidad marítima, permitiendo la actividad pesquera, de remolcadores, servicios de turismo náutico, de recreo, pesca deportiva, modalidad vuelos en paracaídas, remolque de bananas, motos acuáticas y Kayaks.
Lo anterior fue informado por Capitanía de Puerto que ha determinado que ya hay condiciones favorables a la navegación.
La instancia dependiente de la Secretaría de Marina reveló que anteriormente se había tomado la decisión de cerrar por registrarse vientos del noroeste con velocidad de 40 kilómetros por hora, un cielo cubierto la mayor parte del día y un oleaje de entre los 5 y 7 pies de altura, influenciado por los canales de baja presión que se han presentado recientemente en el Pacífico, sin embargo, todo esto ya se ha disipado, con un puerto en calma.
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