La tradicional celebración por el Día de Muertos fue atípica en los panteones de Mazatlán. En esta ocasión, desde temprano los panteones al interior lucieron con pocos visitantes en comparación con años anteriores.
Las agrupaciones musicales que amenizaban una fecha tan especial para las familias mexicanas en este año no se les permitió ingresar, como parte de los protocolos sanitarios.
En el Panteón Jardín Municipal Número 4, ubicado sobre el Libramiento Colosio, la afluencia estuvo controlada. Las familias estuvieron llegando poco a poco, se adecuaron dos accesos, uno como entrada y otro como salida, con el fin de evitar aglomeraciones.
Sobre la barda perimentral, en la entrada principal, se colgó una lona con el reglamento, donde se anunciaba el horario de 7 de la mañana a 7 de la tarde y prohibida la entrada a adultos mayores de 60 años y niños, entre otras restricciones como el no uso de veladoras.
La señora Elvira Estrada acudió en compañía de su familia a visitar a quienes ya se adelantaron en el camino, aunque dijo, su esposo se encuentra sepultado en un panteón privado y no pudo ir a visitarlo este día. Sin embrago, ella se pronunció a favor de los protocolos sanitarios por el bien de la población.
Por otro lado, afuera del panteón, en la entrada se formaron filas de personas que esperaban su turno para poder ingresar, se observó poca presencia de vendedores de antojitos comparado al año pasado. Sobre el Libramiento Colosio, elementos de tránsito municipal estuvieron contralando el aforo vehicular, que también durante la mañana estuvo tranquilo y ordenado.
