La seguridad en Sinaloa, ha tenido un inicio complicado desde las primeras horas del 2021, con la destrucción simultánea de varios puntos del sistema de video vigilancia que no tuvo ninguna reacción por parte de las autoridades frente al desafío lanzado por el crimen organizado en Culiacán y Mazatlán.
Un reto que aunque no fue reconocido como tal por las corporaciones de seguridad en la entidad, dio muestra nuevamente de la tranquilidad con la que pueden operar los grupos delincuenciales en el estado, el alcance que pueden tener y el mensaje que se manda las autoridades al destruir una de las herramientas de mayor utilidad que tiene el estado para monitorear y supuestamente vigilar lo que ocurre en las calles de las principales ciudades del estado.
No ha transcurrido ni una semana del nuevo año y además de la destrucción de las cámaras, se registró una balacera a las afueras de un antro ubicado en pleno centro de la ciudad de Culaicán.
Este martes el gabinete de seguridad, con la asistencia del los mandos militares, de la guardia nacional, marina armada de México y de la secretaría de seguridad pública del estado de Sinaloa, sostuvieron una reunión que se prolongó por varias horas en el palacio de gobierno, seguramente se tuvieron que haber tratado estos temas que han alterado la tranquilidad de los sinaloenses y que estrategias se implementarán para retomar el control de la seguridad en el estado.
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