Lamentablemente
la pandemia del COVID-19 sigue propagándose y las escuelas e institutos de todo
el mundo están transformándose al aprendizaje en casa y en línea, en un intento
por frenar un poco la propagación de la enfermedad. Estas medidas implican un
mayor esfuerzo para los padres, que necesitan dar más tiempo y atención a sus
hijos en casa y conseguir nuevas herramientas o libros de texto, como los de la
Editorial GEU en México, quienes han trabajado para
identificar qué prácticas claves pueden emplearse para que el aprendizaje en
línea sea exitoso.
Tecnología como necesidad básica.
La
igualdad es el principal obstáculo para aprender en línea, digitalizarse es
necesario y es lo primero en lo que deberías pensar. Tanto alumnos como
maestros necesitan dispositivos propios y ancho de banda que funcione a la
perfección para que las clases no se vean afectadas. La mayoría de las familias
no poseen una computadora para cada integrante y posiblemente, mientras las
escuelas estén cerradas, los padres también tengan que trabajar desde casa.
Esto significa que varias personas podrían necesitar utilizar una computadora al
mismo tiempo. Es importante que las escuelas utilicen aplicaciones que también
funcionan en celulares y tabletas, en caso de que no haya una computadora
disponible. Lo positivo es que muchas de estas habilidades digitales serán
igualmente beneficiosas en un aula cuando se normalicen las clases.
Ayuda a tus hijos a planificar la semana.
Planificar
la semana y establecer con exactitud los horarios diarios es muy importante,
incluso si es con solo un día o dos de anticipación. Saber cuales son los
horarios que hay de clases es fundamental, pero también lo es saber de qué hora
a qué hora van a descansar. Esto hará que las horas de estudio sean mucho más
productivas, sobre todo si el descanso se realiza sin tener contacto con
pantallas. Algunas clases especiales como educación física o arte pueden ser
mucho menos atractivas realizarlas en línea como lo es la experiencia en la
escuela. Incentiva a tus hijos a moverse un poco o a expresarse artísticamente
de la forma que más les guste en sus descanso puede ayudarlos a que la rutina
sea más llevadera.
Incentiva a tus hijos a aprender.
El
aprendizaje en línea puede servir de excusa a algunos niños para no esforzarse
tanto. En cambio, para otros puede provocar que las lecciones sean más
difíciles de comprender. Incentiva a tus hijos a que participen
frecuentemente de las clases en línea. La retroalimentación inmediata con sus
compañeros y maestros ayudará a afianzar esos conocimientos nuevos y los hará
sentir motivados para seguir aprendiendo. También es muy importante abordar el
costo emocional. Consulta a tus hijos cómo se sienten, tanto en lo personal
como con las herramientas digitales para saber si necesitan ayuda extra o tener
alguien con quien hablar. Estar encerrado en casa puede provocar ansiedad.
Tomarte el tiempo para controlar esos sentimientos es tan importante como
chequear los objetivos académicos.