La Fundación Huellita con Causa que preside Brenda González tiene en su santuario 100 perros, el 98 por ciento de ellos mestizos y de ellos el 50 por ciento son casos especiales, son viejitos, toman medicamentos, convulsionan, les falta una patita entre otras situaciones que complican su adopción.
En muchos casos llegan de un maltrato muy fuerte, de una indiferencia de la gente que a pesar de que ven su dolor no hacen nada para ayudarlos.
Así sucedió con Laila una perrita que hoy es especial, ella fue encontrada por la Fundación atropellada, con múltiples facturas, fue necesario realizarle varias cirugías pero ya no podrá caminar fácilmente.
A pesar de la condición de laila ella se mueve por el santuario, ya tienen 4 años ahí, estuvo en un hogar temporal pero mejor regreso con Huellita, ella no ocupa tanta actividad física pero sí un hogar que la ame y la atienda.
Otro caso es el de Policarpia, Poli como mejor la conocen, porque ella junto con un perrito fue rescatada en un canal por elementos de seguridad de Culiacán, su acompañante fue adoptado incluso por un policía pero Poli no estaba lista para este proceso.
Poli tenía garrapatas, llevó de 3 a 4 semanas sacarla adelante, requirió limpiarla, atenderla de parásitos, y sobretodo que recuperara la confianza por maltratos que había sufrido antes de su rescate.
Hoy Poli de 2 años de edad, está totalmente rehabilitada y busca una familia, no requiere de tanto espacio en la casa, solo debe existir un compromiso de su paseo diario.
Puede convivir con niños, con cachorros, con gatos, con perros grandes.
Brenda González de Fundación Huellita señala que el adoptar una mascota logra salvar dos vidas
