Después de más de un año de su inauguración, el Rastro de Mazatlán consiguió la Certificación Tipo Inspección Federal (TIF) por cinco años.
Esta certificación se obtuvo una vez que las autoridades del Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria comprobaron que cuenta con las instalaciones adecuadas que cumplen con las más altas normas de higiene e inocuidad de los productos cárnicos.
Con esto, los ganaderos que sacrifican sus animales ahí podrán distribuir el producto a nivel nacional e internacional, informó Luis Omar Millán, director del rastro.
Señaló que incluso hay interés de algunos productores para exportar a Rusia. En lo que va del año se han sacrificado 1600 reses y 1100 cerdos, se espera que con la certificación este número aumente.